lunes, 21 de noviembre de 2016

Tema 4: La Baja Edad Media: la crisis de los siglos XIV y XV

Tema 4: La Baja Edad Media: la crisis de los siglos XIV y XV












Tema 4: La Baja Edad Media: la crisis de los siglos XIV y XV


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    La Baja Edad Media: la crisis de los siglos XIV y XV:


    -Organización polí
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    Tema 4: La Baja Edad Media: la crisis de los siglos XIV y XV


    1. 1.
      1.Organización política e instituciones de gobierno.
      2.Crisis demográfica, económica y política.
      3.La expansión de la Corona de Aragón en el Mediterráneo.
      4.Las rutas atlánticas: castellanos y portugueses. Las Islas
      Canarias.
      TEMA 4 – La Baja Edad Media: la
      crisis de los siglos XIV y XV
      Profesores: Ricardo Chao Prieto y Óscar González García



    2. 2.

      INTRODUCCIÓN
      El fin de la expansión territorial cristiana, a mediados del S. XIII, significaba
      que sociedades forjadas bajo la dirección de una nobleza guerrera que
      basaba su poder en la violencia y la conquista, deberían ahora organizarse
      de otra manera.
      Los dos últimos siglos de la Edad Media fueron tan problemáticos, que se
      han calificado como tiempos de crisis, si bien esta se cebó en el XIV,
      siendo el XV un tiempo de recuperación.
      Los problemas, se manifestaron en facetas muy diversas, de carácter
      político, social y económico. En el campo político, la crisis venía
      provocada por los cambios que los monarcas estaban impulsando, y que no
      gustaban a la poderosa nobleza, de ahí que los siglos XIV y XV se definan
      como la etapa de la lucha nobleza Vs monarquía. Los problemas de
      carácter social y económico tuvieron su origen en buena medida en el
      azote de la Peste Negra desde mediados del siglo XIV, con repercusiones
      no solo demográficas, sino también económicas, políticas y de diversa
      índole.



    3. 3.

      1. ORGANIZACIÓN POLÍTICA E INSTITUCIONES DE GOBIERNO:
      Los siglos finales de la Edad Media
      fueron muy importantes en la
      configuración política de los reinos
      peninsulares. Buena parte de las
      instituciones se habían creado con
      anterioridad, pero ahora se
      reestructuran o se crean
      instituciones nuevas. Se darán los
      primeros pasos en la organización
      del estado, el camino hacia la
      monarquía autoritaria, la ordenación
      de la administración local, la
      organización de la administración
      de justicia, etc.
      La Península Ibérica estaba ocupada por cinco grandes unidades políticas: el
      reino de Navarra, la corona de Castilla, la corona de Aragón (en los que nos
      centraremos), el reino de Portugal, y el reino nazarita de Granada.



    4. 4.

      1. ORGANIZACIÓN POLÍTICA E INSTITUCIONES DE GOBIERNO:
      1.1 Corona de Castilla
      En los ss. XIV-XV la Corona fue ampliando su
      autoridad, imponiendo el principio de la Monarquía
      Autoritaria, según la cual el monarca es la máxima
      autoridad y sólo es responsable ante Dios. El poder del
      rey era, por tanto, muy amplio, pero en realidad
      dependía de su fortaleza y de su relación con los
      nobles.
      En los reinos de la Corona de Castilla había una gran
      diversidad legislativa, con multitud de fueros o leyes
      privativas de lugares concretos. Para unificar sus
      diferentes reinos Alfonso XI impuso el Ordenamiento
      de Alcalá (1384), que señalaba que la facultad
      legislativa es exclusiva del monarca. Con ello
      desaparecieron las legislaciones propias de cada reino,
      como el Fuero Juzgo de León, que venía
      manteniéndose desde el s. IX.



    5. 5.

      1. ORGANIZACIÓN POLÍTICA E INSTITUCIONES DE GOBIERNO:
      Instituciones de la Corona de Castilla:

      La Corte: compuesta por los familiares, nobles y eclesiásticos de confianza del
      rey. Recibían privilegios del monarca a cambio de su fidelidad.

      El Consejo Real: en principio servía para asesorar al monarca (función
      consultiva), pero se convirtió en un órgano decisivo de la administración central,
      al tomarse en él los acuerdos que afectaban a la vida de los reinos. En este
      Consejo fueron ganando importancia los juristas formados en las universidades
      que, evidentemente, eran nobles y eclesiásticos.

      Las Cortes: Reunían a representantes de los tres estamentos de la sociedad, la
      nobleza, el clero y el pueblo. Las primeras tuvieron lugar en el reino de León en
      1188. No tenían sede fija, por lo que se reunían en alguna de las ciudades que
      tenían derecho a voto. Como el rey reunía en sus manos todos los poderes
      (incluido el legislativo), las Cortes sólo le servían para pedir ayuda
      económica, y también para jurar al heredero de la corona. A cambio el rey
      escuchaba las quejas y peticiones de las ciudades. Desde 1349 se unificaron
      las Cortes de León y de Castilla, porque con anterioridad era frecuente que se
      reunieran por separado.



    6. 6.

      1. ORGANIZACIÓN POLÍTICA E INSTITUCIONES DE GOBIERNO:1. ORGANIZACIÓN POLÍTICA E INSTITUCIONES DE GOBIERNO:

      La Audiencia: desde 1371 ejercía funciones judiciales en nombre del rey. Era
      el órgano más representativo de la justicia del reino. Al principio fue itinerante,
      pero finalmente se estableció en la Chancillería de Valladolid como órgano
      superior de la justicia.



    7. 7.


      Hacienda: El progresivo aumento de los ingresos fiscales tuvo una
      importancia decisiva en el fortalecimiento de la Corona. Impuestos como la
      alcabala, sobre las compraventas, o el montazgo, sobre la lana, enriquecieron
      las arcas reales. Se desarrollaron entonces las contadurías de Hacienda y
      Cuentas, y se organizó una red de recaudadores extendida por todo el
      territorio.

      Organización del territorio: En tiempos de Alfonso X se dividió el reino en
      siete provincias, llamadas adelantamientos y merindades (una era el
      Adelantamiento del Reino de León).
      La Corona logró también extender su control sobre los antiguos Concejos,
      reunión de todos los vecinos de una localidad que parlamentaban y decidían
      sobre sus asuntos. Alfonso XI organiza desde 1345 el sistema de Concejos
      cerrados o Regimientos, antecedente de los ayuntamientos: León sería uno
      de los tres primeros. El cambio radica en que ahora se encargarían del
      gobierno unas pocas personas, notables, llamadas regidores. Después
      surgiría la figura del Corregidor, oficial enviado por el rey y que era juez en
      primera instancia.

      En lo militar, se comenzó a configurar un ejército permanente a las órdenes
      del rey, con lo que éste no dependería de las mesnadas de los nobles.
      1. ORGANIZACIÓN POLÍTICA E INSTITUCIONES DE GOBIERNO:



    8. 8.

      1. ORGANIZACIÓN POLÍTICA E INSTITUCIONES DE GOBIERNO:
      1.2. Corona de Aragón
      Aquí el rey tenía un poder más limitado que en
      Castilla. No podía imponer siempre su voluntad,
      sino que era una monarquía pactista, en la que el
      monarca debía respetar los derechos y las
      costumbres de los distintos estados que componían
      la corona.
      Era una Corona prácticamente confederal: el rey
      era el primero que tenía que respetar la diversidad,
      aunque Pedro IV consiguió imponer algunas
      instituciones de carácter centralista, como la
      Cancillería y el Consejo Real.
      A esos Estados (Aragón, Cataluña, Valencia,
      Mallorca) les unía el ser patrimonio de un mismo
      rey, pero tenían una autonomía absoluta en cuanto
      a leyes, instituciones o personalidad cultural.



    9. 9.

      Cada uno de los Estados o reinos, salvo
      Mallorca, tenía sus Cortes particulares, con
      escasa capacidad legislativa, ya que era el rey
      quien legislaba. Servían para recaudar dinero
      para la política del monarca aragonés
      (guerras, coronaciones...) aunque éste tenía
      que escuchar las quejas y agravios de los
      distintos brazos o estamentos.
      En ocasiones se reunían las Cortes generales
      de toda la Corona en la localidad de Monzón.
      Cada Estado tenía además un organismo para
      garantizar su autonomía: la Generalitat en
      Cataluña, la Diputació en Valencia y el
      Justicia en Aragón. Para gobernar estos
      reinos, así como otras zonas del Mediterráneo,
      la Corona de Aragón se valía de los virreyes.
      Los principales municipios tenían amplia
      autonomía. Así Barcelona se gobernaba por
      una asamblea: el Consell de Cent (Consejo
      de Ciento). Esta asamblea nombraba a los
      magistrados de la ciudad: los consellers, que
      eran nobles y grandes burgueses.



    10. 10.

      Instituciones centrales de la Corona de Aragón:

      Consejo Real:
      Aconseja y ayuda al rey a tomar
      decisiones tras un debate razonado, lo
      que hace recaer sobre esta institución
      la responsabilidad de las decisiones de
      gobierno. También recaerían sobre el
      Consejo las iras populares cuando no
      están de acuerdo con sus decisiones.

      Audiencia Real:
      Institución encargada de la
      administración de justicia, adquiere
      una posición fundamental dentro de
      los reinos.

      Cancillería Real:
      Institución encargada de los asuntos
      administrativos. Ocupada por
      miembros del clero, desde comienzos
      del siglo XIV fueron juristas los
      encargados de las tareas de la alta
      administración, que eran la función
      esencial de este organismo.



    11. 11.

      1. ORGANIZACIÓN POLÍTICA E INSTITUCIONES DE GOBIERNO:
      1.3. El reino de Navarra:
      Mientras que sus vecinos de
      Aragón y Castilla aumentaban
      sus territorios con la gran
      expansión de los siglos XII y
      XIII, Navarra se quedaba
      encerrada entre ambos reinos,
      y no pudo crecer (Castilla
      anexionó Álava y Guipúzcoa en
      1200). Durante un tiempo, a
      comienzos del siglo XIV, este
      reino estuvo bajo el dominio de
      Francia, por el matrimonio de la
      reina Juana I de Navarra con
      Felipe IV el hermoso de
      Francia.



    12. 12.

      1. ORGANIZACIÓN POLÍTICA E INSTITUCIONES DE GOBIERNO:
      Recuperado el dominio navarro a
      mediados del siglo XIV por la familia
      Evreux, se inició la organización de
      las instituciones de manera similar a
      los reinos vecinos, con más
      parecidos a la corona de Aragón.
      Durante el siglo XV el reino de
      Navarra fue sufriendo un proceso de
      debilitamiento, que se hizo cada vez
      más grave por los cambios dinásticos
      y las luchas internas entre herederos
      de la corona. La más grave fue la
      que enfrentó a Juan II de Aragón,
      con el príncipe Carlos de Viana, a
      quien le correspondía el reino, como
      hijo del matrimonio de Juan II con la
      reina Blanca de Navarra.
      Principe de Viana en un Códice aragonés



    13. 13.

      2. CRISIS DEMOGRÁFICA, ECONÓMICA Y POLÍTICA:
      2. 1. Crisis demográfica y económica.
      El crecimiento constante de la población desde el S. XI permitió en la Península
      Ibérica la repoblación y explotación de las tierras que se conquistaban a los
      musulmanes y permitió el impulso de la guerra.
      En el S. XIV los problemas climáticos produjeron malas cosechas y hambrunas
      que, además, se verán agravadas por la Peste Negra, que asoló Europa en
      1348-1351.
      Esta terrible epidemia llegó a la
      Península Ibérica con diversas
      puertas de entrada (el estrecho de
      Gibraltar, la zona oriental de los
      Pirineos y los puertos de Levante) y
      atacó a pueblos y ciudades de la
      Corona de Castilla y de Levante,
      provocando tal mortandad que dejó
      numerosos despoblados.



    14. 14.

      2. CRISIS DEMOGRÁFICA, ECONÓMICA Y POLÍTICA:
      Su influencia fue más allá del propio campo
      de la demografía, pues tuvo importantes
      repercusiones económicas como falta de
      mano de obra en el campo, caída de la
      industria y el comercio, aumento de los
      precios, y descenso de las rentas de los
      propietarios.
      Además la peste se convirtió en una
      enfermedad endémica, que reapareció
      cada cierto tiempo, provocando nuevas
      mortandades y aterrorizando a la población.
      Las guerras y el hambre también
      ayudaron a mantener la regresión
      demográfica en el siglo XIV, aunque la
      caída de población fue mayor en Cataluña
      (perdió un 40%) y en el norte de Castilla
      que en el Sur.
      En el S. XV, la población se fue
      recuperando.



    15. 15.

      En el s. XV, la crisis se empezó a superar y se puede
      hablar de cierta expansión en la Corona de Castilla.
      Esta recuperación se basó sobre todo en la ganadería
      ovina (oveja merina) y en la exportación de lana hacia el
      Atlántico europeo. El momento clave fue la apertura del
      mercado de Flandes después de que este territorio hubiera
      dejado de recibir lana de Inglaterra.
      En una primera fase la lana se concentraba en manos de
      comerciantes burgaleses y luego en los puertos del
      Cantábrico. Desde estos puertos, que se agrupaban en la
      Hermandad de la Marina de Castilla, también se
      exportaba hierro de Vizcaya. Además desde el Atlántico
      Sur se comerciaba con aceite o vino.
      A nivel interior, se dio el auge la las ferias como las de
      Medina de Campo (la más importante de la península),
      Valladolid, Burgos o Segovia.
      También empezaron a desarrollarse las actividades
      bancarias (aparecen las sociedades mercantiles y las
      letras de cambio). Estas actividades supusieron los
      primeros pasos del sistema económico capitalista.
      Mientras, la burguesía adquiría más importancia y
      controlaba el gobierno de las ciudades (que iban
      aumentando de tamaño), lo que muestran edificios como
      catedrales, lonjas o ayuntamientos.



    16. 16.

      2.2. Crisis social.
      Ante las dificultades económicas, la nobleza se apropió de tierras de los
      Concejos o del rey, lo que supuso enfrentamientos con ambos. Aumentó la
      opresión de los campesinos (los llamados “malos usos”), que en ocasiones
      iniciaron revueltas. Los conflictos antiseñoriales más conocidos en el XV
      fueron:
      ● El de los Irmandiños en Galicia, que fue una sublevación de campesinos y
      pequeños nobles contra la alta nobleza, caracterizada por la destrucción de sus
      castillos.
      ● Los Payeses de Remensa en Cataluña, que encabezaron dos “Guerras
      Remensa” contra los nobles. Los payeses de remensa eran cultivadores de
      tierras ajenas adscritos a ellas de modo forzoso y hereditario. Fernando el
      Católico puso fin al problema en 1486 aboliendo la adscripción a la tierra y los
      malos usos, mediante el pago por los payeses de un precio para liberarse.
      Además de enfrentarse a otros grupos sociales, los nobles también luchaban
      entre ellos, agrupándose en bandos en caso de conflicto, como ocurrió en la
      Guerra Civil castellana del siglo XIV.



    17. 17.

      La mala situación económica también implicó conflictos sociales en las
      ciudades: las clases bajas se rebelaron en ocasiones contra los abusos de los
      nobles y los grandes mercaderes. El caso más destacado fue el enfrentamiento
      entre la Busca (gremios artesanos) y la Biga (grandes mercaderes) en la
      ciudad de Barcelona en el XV.
      Las clases populares también reaccionaron en ocasiones atacando las
      propiedades de los grupos minoritarios, como los judíos, a los que se les
      acusaba de provocar la peste y otros males. El antisemitismo fue
      especialmente violento en la última década del siglo. Hubo conversiones
      masivas de judíos, en su mayor parte simuladas, con lo cual, el “problema
      judío” dejó paso al “problema converso”.
      Matanza medieval de judíos



    18. 18.

      2.3. Crisis política.
      Los reyes intentaron tener un poder más efectivo en sus reinos. Esto chocó con
      la pretensión de los nobles y los poderes locales de aumentar su poder y de
      participar en el gobierno del reino. Existió una lucha continua entre el rey y los
      nobles; éstos aprovechaban la minoría de edad del monarca (Fernando IV,
      Alfonso XI, Juan II...) para imponer sus intereses o bien provocaban una guerra
      civil al oponer otro candidato al trono.
      Durante el XIV y la mayor parte del XV, los nobles protagonizaron esta pugna y
      consiguieron controlar a la mayoría de los reyes. Se dio por tanto una debilidad
      del poder real. En la segunda mitad del XV la situación cambió y los reyes
      fueron consiguiendo incrementar su poder.



    19. 19.

      2.3.1. La crisis política en la Corona de Castilla
      Tras la muerte de Alfonso X (1284), hubo una larga crisis sucesoria hasta que
      Alfonso XI (1312-1350) pudo restablecer la autoridad.
      Pedro I “el Cruel” fue uno de los reyes que intentó imponer su autoridad, pero fue
      derrotado en la Guerra Civil Castellana en 1369 por su hermanastro Enrique II, que
      lo asesinó. La nobleza adquirió una gran influencia, tanto que fue llamado “Enrique el
      de las mercedes”, por las tierras y privilegios que otorgó a los nobles. Con Enrique II
      se inauguró además una nueva dinastía, la de los Trastámara. La influencia de la
      nobleza continuó con Juan I, que intentó recuperar Portugal, pero fue derrotado en
      Aljubarrota (1385). El reinado de Juan II fue muy conflictivo. Su valido Álvaro de
      Luna consiguió vencer a la nobleza, pero ésta terminó consiguiendo que el rey
      ordenara la muerte del favorito. Enrique IV (1454-1474) venció al sector de la
      nobleza que pretendía deponerlo, consiguiendo controlar la situación, pero a su
      muerte se desató una nueva Guerra Civil por la sucesión.
      La derrota castellana
      ante los portugueses en
      Aljubarrota►



    20. 20.

      2.3.2. La crisis política en la Corona de Aragón
      La crisis empezó a manifestarse hacia el tercer o cuarto decenio del siglo XIV,
      cuando comenzaba su reinado Pedro IV “el Ceremonioso” (1336-1387),
      monarca que tenía como objetivo al iniciar su reinado incrementar el poder regio.
      Venció a los nobles en repetidas ocasiones, y se enfrentó a Pedro I “el Cruel” de
      Castilla en lo que se llamó “la Guerra de los Dos Pedros”, que acabó en tablas.
      A la muerte de Pedro IV el ceremonioso le sucedieron sus hijos, Juan I (1387-
      1396) y Martín I (1396-1410), pero ambos murieron sin heredero varón, lo que
      provocó una crisis sucesoria en la corona, pues el derecho de este reino
      impedía reinar a las mujeres. La crisis se resolvió mediante el Compromiso de
      Caspe (1412), que eligió como rey a Fernando I de Trastámara (Fernando de
      Antequera, tío de Juan II de Castilla). Así acabó gobernando la misma dinastía
      Trastámara en las dos Coronas.
      Fernando I tuvo un reinado breve (1412-1416) en el que abundaron los
      problemas con la nobleza.



    21. 21.

      Alfonso V “el Magnánimo” (o “el Sabio”) de
      Aragón (1416-1458), continuó el interés por
      conquistar territorios italianos y consiguió ser
      rey de Nápoles.
      El ascenso al trono de su hermano Juan II
      (1458-1479) conduciría a una lucha de los
      grupos sociales, urbanos y rurales que produjo
      una situación de crisis de la que no saldría la
      corona de Aragón hasta el ascenso al trono de
      Fernando el Católico. Juan consiguió la victoria
      en la Guerra Civil en Cataluña gracias al apoyo
      de campesinos y los pequeños burgueses.
      En definitiva, el siglo XV no fue tan favorable
      para Aragón como para la Corona de
      Castilla. El desarrollo de Barcelona y Valencia,
      que comerciaban con todo el Mediterráneo, se
      percibe en los numerosos edificios públicos y
      palacios de esta época. Pero aún pesaba
      mucho lo dura que había sido la crisis durante el
      siglo XIV. Y además Cataluña se vio asolada en
      ese período por luchas sociales (payeses de
      remensa, Biga-Busca) que devastaron este
      territorio.
      Juan II de Aragón (1458-1479)



    22. 22.

      2.3.3. La crisis política en Navarra
      Durante estos últimos siglos
      medievales el gobierno estuvo en
      manos de dinastías de origen
      francés: Capetos, Evreux, Foix,
      aunque también reinaron los
      Trastámara un tiempo. El monarca
      más destacado fue Carlos III el
      Noble (1387-1425).
      A mediados del s. XV Navarra sufrió
      una cruenta y larga guerra civil
      entre dos facciones de nobles: los
      beamonteses, que tenían el apoyo
      de los castellanos, y los
      agramonteses, que tuvieron primero
      como aliados a los aragoneses y
      luego a los franceses.
      Las injerencias extranjeras (Castilla, Aragón, Francia) fueron continuas. Aragón
      siempre trató de hacerse con Navarra, y acabaría consiguiéndolo con Fernando el
      Católico ya en el s. XVI, como veremos.



    23. 23.

      3. LA EXPANSIÓN DE LA CORONA DE ARAGÓN EN EL MEDITERRÁNEO
      Jaime I el Conquistador había ampliado la Corona de Aragón al ocupar a los
      musulmanes Valencia y Baleares, pero a mediados del siglo XIII la expansión
      se vio frenada por la conquista castellana de Murcia. Esto supuso que la política
      exterior aragonesa se orientara hacia el Mediterráneo.
      A final del siglo XIII Aragón pasó a dominar Sicilia, tras la revuelta que hubo
      en la isla contra los reyes franceses de la Casa de Anjou (las “Vísperas
      Sicilianas” en 1282), en la cual los sicilianos ofrecieron el trono de su isla al rey
      de Aragón. Durante la primera mitad del XIV Jaime II consiguió también la isla
      de Cerdeña y los Almogávares (soldados mercenarios catalanes) realizaron
      una expedición al Imperio Bizantino para defenderlo contra los turcos. Allí
      conquistaron, temporalmente, los ducados de Atenas y Neopatria (Grecia). En
      la primera mitad del XV, con Alfonso V se conquistó el Reino de Nápoles, tras
      vencer a los franceses de la Casa de Anjou. Este rey trasladó su Corte a la
      ciudad de Nápoles.
      La oposición a la expansión aragonesa fue de Francia y de ciudades como
      Venecia y Génova, con las que mantuvo varios conflictos armados.



    24. 24.

      La expansión supuso una importante actividad comercial, sobre todo en las
      ciudades de Barcelona y Valencia. Se crearon Consulados (representaciones
      comerciales) catalanes en la Península Itálica, el Imperio Bizantino o el Norte de
      África, donde se enlazaba con el comercio que traía las especias y la seda desde
      el Lejano Oriente. Barcelona exportaba hierro e importaba cereales y tejidos de
      Sicilia y Cerdeña, pieles y cuero del norte de África. La irrupción de los turcos en
      Bizancio en 1453 cortó las rutas de comercio con Asia y perjudicó el comercio
      catalán que entró en crisis en el siglo XV.



    25. 25.

      4. LAS RUTAS ATLÁNTICAS: CASTELLANOS Y PORTUGUESES. LAS ISLAS
      CANARIAS.
       La expansión castellana se dirigió principalmente hacia el Atlántico.
       S. XIV – se asegura el dominio del Sur de la Península – Toma de Algeciras en
      1344 – el Estrecho de Gibraltar y su control, quedan en manos castellanas.
      FOCOS DE
      COMERCIO
      Y EXPANSIÓN
      SEVILLA Y LOS
      PUERTOS
      ANDALUCES
      PUERTOS
      CANTÁBRICOS
      • Agentes comerciales y banqueros
      italianos – genoveses.
      • Desarrollo de la construcción naval.
      • Marinos vascos dominan el
      comercio hacia la costa africana:
      oro y esclavos.
      • Bilbao: centralizaba la exportación
      de lana castellana y hierro vasco
      hacia Francia, Inglaterra y Flandes,
      de donde se traían paños, tapices y
      objetos de lujo.



    26. 26.

      RIVALIDADES Y ALIANZAS COMERCIALES
      PORTUGALFRANCIA
      • Portugal sería el rival directo en el
      dominio de las rutas atlánticas:
      habían descubierto Madeira, las
      Azores, y comenzaron a recorrer la
      costa occidental africana.
      • Portugal se alió con Inglaterra.
      • Juan I de Castilla invade Portugal
      en 1383 – Desastre castellano de
      Aljubarrota (1385).
      • Las relaciones de rivalidad duraron
      más allá de la Edad Media.
      • La importancia del Atlántico llevó a
      la Castilla de los Trastámaras a
      alinearse con Francia, con la que se
      firmó una alianza militar. Por esa
      razón, navíos castellanos
      participaron en la defensa de las
      costas francesas durante la Guerra
      de los Cien Años (1337-1453).
      • La intención castellana era
      asegurar la ruta por el Canal de la
      Mancha hacia Flandes. Esta ruta
      sería dominada hasta bien entrado
      el S. XVI.



    27. 27.

      PORTUGAL.- Los portugueses desarrollaron la teoría de la navegación, pues
      para un pueblo sin posibilidad de expansión terrestre (en 1249 ya habían
      completado su propia Reconquista) sólo quedaba el mar . El príncipe Enrique
      el Navegante (†1460) creó una escuela náutica con constructores de navíos y
      cartógrafos. Su objetivo era llegar a la India. La primera conquista fue
      Madeira a principios del XV, y después las Azores. Después los portugueses
      recorrieron la costa africana en busca de oro, marfil y esclavos. En 1487
      Bartolomé Dias consiguió doblar por vez primera el Cabo de Buena
      Esperanza, en la punta sur de África. En 1498 Vasco de Gama atravesó el
      Índico y llegó hasta la India, abriendo una ruta asiática basada en el comercio
      de las especias.
      Enrique el Navegante



    28. 28.

      CONQUISTA DE LAS ISLAS CANARIAS
      Situado a más de 1000 kilómetros de Europa, en el
      siglo XIV el archipiélago canario estaba en una fase
      de evolución cultural próxima al Neolítico. Sus
      habitantes (guanches) se dedicaban al cultivo de
      cereal y al pastoreo.
      A finales del siglo XIII los canarios comenzaron a
      recibir visitas de rapiña efectuadas por
      portugueses, genoveses y castellanos, que se
      limitaban a robar o a llevarse hombres como
      esclavos.
      La situación cambió cuando a comienzos del
      siglo XV, en nombre del reino de Castilla una
      expedición dirigida por dos mercenarios de origen
      normando, Jean de Bethencourt y Gadifer de La
      Salle, conquistó la isla de Lanzarote. Después
      vendrían las conquistas de Fuerteventura, La
      Gomera y El Hierro. Estas primeras conquistas se
      hacían a título particular, de manera que los
      conquistadores se reservaban esas tierras que los
      monarcas castellanos les entregaban como feudos. Bethencourt y La Salle



    29. 29.

      Más adelante fueron los propios monarcas (Reyes Católicos especialmente)
      quienes se encargaron de la conquista del resto de las islas, reservándoselas
      para sí. La última conquistada fue Tenerife en el año 1496, lo que alarga esta
      conquista de Canarias durante todo el siglo XV.
      Durante un tiempo la conquista de Canarias enfrentó a castellanos y
      portugueses, ya que Portugal, que se estaba encargando de la exploración de
      la costa africana consideraba que le correspondía la operación El conflicto se
      solucionó por el Tratado de Alcaçovas (1479) que reservó estas islas para
      Castilla, a cambio de que los portugueses mantuvieran la exclusividad de la
      expansión por la costa africana. Los castellanos impusieron no solo su dominio
      político, sino también su cultura, de manera que las formas de vida o de cultura
      canarias se fueron extinguiendo poco a poco tras la conquista castellana y la
      castellanización progresiva del archipiélago.
      Ídolo guanche
      Teide, montaña sagrada
      para el pueblo guanche
















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